A pocos días del ingreso del Sol en el signo de Tauro, este 23 de abril vivimos la Luna llena a los cuatro grados del signo de Escorpio, un signo de agua, yin muy conectado a Plutón, quien, desde Acuario se relaciona con una cuadratura tanto con el Sol como con la Luna, un aspecto tenso que no permite que se integren adecuadamente los planetas.
La Luna es un astro que actúa como instrumento de percepción emocional en los humanos, su efecto sensorial en Escorpio mueve y transforma las emociones. Debido a que el agua es su elemento, fría y húmeda conecta intuitivamente con el otro; por eso, en su tránsito por un signo de agua misterioso y lleno de secretos como Escorpio, es capaz de crear verdaderos universos interiores inaccesibles para los demás y de crear una gran introversión emocional, el aspecto con Plutón es controlador y destructivo, aunque transformador para el individuo.
El Sol en Tauro tensionado con Plutón tiene diferentes facetas, por un lado, necesita conocer a profundidad sobre cualquier tema, mientras por otro cuestiona severamente todo aquello que descubre. Es un aspecto en el que se suele enfrentar a la figura de autoridad, tanto a nivel colectivo como a nivel individual.
Tauro, un signo de tierra que da especial importancia al bienestar materializado, es el lugar en donde se concreta lo planeado en Aries ya que es mucho menos impulsivo y se concentran los temas en el trabajo de forma fría y metódica, vemos que poco a poco se espera la materialización de resultados, por eso en la naturaleza le corresponde el momento en donde las plantas después de brotar afirman las raíces; es el arraigo, la búsqueda de estabilidad y permanencia mediante la constancia, la practicidad y el aseguramiento de recursos materiales. Lo rige Venus y esta conexión de la tierra con un planeta que suele llenarnos de ilusiones nos hace interactuar con los placeres y la belleza; le da una magia que distingue y le caracteriza.
En este signo se exalta la Luna, el arquetipo de la madre, el universo del infante que busca alimentarse, tomando del pecho de su madre la seguridad y estabilidad en un mundo material que empieza a descubrir. De ahí la confianza de Tauro, de la dicha y el placer obtenidos en la primera infancia.
Rige la parte que corresponde al quinto chacra, el cuello y la garganta, la conexión entre nuestra parte intuitiva y mental y la parte motriz de nuestro cuerpo, es decir conecta los chacras superiores con los inferiores, expresando o reprimiendo las ideas intelectuales y emocionales. Allí se encuentran las vértebras cervicales, las protectoras de la medula espinal que sostienen y permiten manipular a la cabeza.
Esta Lunación conecta la parte racional con la emocional, cuestionando ambas con severidad, busca llegar a la raíz de cualquier problema destruyendo cualquier emoción que se interponga con el objetivo y aunque se suele sobrevivir, deja heridas que tardan en sanar.
La invitación en este plenilunio y las siguientes semanas hasta la luna nueva es a soltar emociones estancadas que no nos dejan fluir en los proyectos personales o con la pareja, usar la fuerte energía de Plutón para viajar ligeros en la vida.
Luna Godel
22. 04. 2024
FRECUENCIA INVISIBLE 